abril 16, 2018

Tejiendo un país, es una iniciativa de emprendimiento social que a través de la creatividad está innovando en el mercado del calzado. Fabrican botas y zapatos en lana de oveja mediante una técnica ancestral, además utilizan llantas recicladas para la elaboración de las suelas.

Son elaborados por mujeres en condición de discapacidad, adultas mayores y madres cabeza de familia.

Tejiendo un país, surgió como solución a una necesidad personal y se ha convertido en una empresa familiar y social con mucho futuro. Participaron en la convocatoria RECON y fueron  seleccionados entre los 60 mejores emprendimientos sociales de Colombia. Su creadora, Linda Castro es nuestra emprendedora social de la semana y nos contó sobre su proyecto.

RECON: ¿Quién es Linda Castro?

Linda Castro: Soy una emprendedora social, estudiante de gastronomía en la Universidad Uniagustiniana de Bogotá, estoy cursando 6to semestre y actualmente realizo un curso de emprendimiento que nos brinda la universidad.

REC: ¿Cómo surge tu iniciativa Tejiendo un País?

LC: De varios factores. En primer lugar, nace de un problema económico, yo no tenía recursos para comprarle zapatos a mi hija, entonces decidí buscar una alternativa y le hice unos zapatos con lana.

Nace de la desesperanza. Uno cree que los problemas no traen nada bueno, pero en mi caso ocurrió todo lo contrario. Encontré una solución a esa problemática y creé un proyecto que se convirtió en empresa: Tejiendo un país.

También nace de la desigualdad, aquí a las personas discapacitadas no les dan empleo porque consideran que por tener una limitación no son útiles o productivos. Yo sufro de pérdida de la memoria y tejiendo encontré una terapia que me sana, por eso me motivé a ofrecer trabajo y aceptar a personas que tengan algún tipo de discapacidad, la única condición es que puedan usar sus manos para tejer.

REC: ¿Por qué Tejiendo un país es un emprendimiento social?

LC: Porque en primer lugar, para fabricar nuestros zapatos empleamos llantas recicladas para la elaboración de suelas, ayudando así al medio ambiente, en la reutilización de un desecho que contamina.

«Una sola llanta de camión necesita para su fabricación medio barril de petróleo crudo, y su elaboración y posterior desaparición siempre genera emisiones de CO2 (óxido de carbono) a la atmósfera».

En segundo lugar, porque brindamos oportunidades laborales a personas en condiciones de vulnerabilidad y contribuimos con el proceso de inclusión, que es tan necesario para nuestra sociedad. El requisito para trabajar con nosotros, es tener alguna discapacidad, ser mujer cabeza de familia o ser adulta mayor.

REC:<span «=»» hurme=»» geometric=»» sans=»» style=»box-sizing: border-box;»> ¿Cuándo empiezas a ver Tejiendo un país como una oportunidad de negocio?

LC: Cuando la niña, mi hija empezó a usar los zapatos, a muchas personas les gustó el diseño y me dijeron que por qué no les fabricaba zapatos así para sus hijas, ahí descubrí que es un negocio rentable, la materia prima no es costosa, lo más caro es la mano de obra.

REC: ¿Cuánto cuesta un par de zapatos de los que elaboran?

Para niños entre $80.000 y $100.000 dependiendo la talla y para adultos el costo es de $250.000

REC: ¿Cómo describes los zapatos que elaboras y por qué son diferentes a los demás?

LC: Son zapatos impermeables, hechos 100% a mano, utilizamos lana Peruana de oveja, empleamos una técnica ancestral  para el tejido y la suela es de llanta reciclada.

Es importante decir que son impermeables porque la gente cree que al ser de lana se les filtra el agua, nosotros le hacemos un proceso interno de impermeabilización para que esto no suceda y sean zapatos aptos para el invierno. La lana es material resistente y duradero.

REC: ¿Actualmente cuántas personas trabajan en la elaboración de los zapatos?

LC: Actualmente contamos con 8 mujeres y mi esposo, todas tienen las características mencionadas anteriormente, algunas con discapacidad auditiva, problemas de columna, pérdida de memoria, madres solteras y adultas mayores.

Queremos demostrar al mundo que uno sí puede superarse, a pesar que nos dijeron que no podíamos trabajar y que no éramos útiles yo pude demostrar lo contrario.

REC: ¿Qué es Guio y cuál es la relación con Tejiendo un país?

LC: Tejiendo un país es la iniciativa que surgió para agrupar mujeres con las características mencionadas y Guio es el nombre comercial para vender los zapatos, es la marca.

REC: ¿Qué expectativas tienes para Guio?

LC: queremos llegar a ser una multinacional, la primera empresa mundial que elabore botas para invierno a bases de lana y suelas de llanta, con trabajadores en condición de discapacidad, personas que para el resto del mundo no son útiles y a las cuales, nosotros sí les damos valor.

REC: ¿Actualmente que capacidad de producción tienen?

LC: 100 pares de botas al mes. Por lo que el proceso es manual, necesitamos un inversionista para comprar maquinaria que nos permita agilizar parte del proceso.

REC: Nos hemos enterado que estás en búsqueda de un inversionista. ¿Con cuánto capital deseas contar, aproximadamente?

LC: 60 millones de pesos colombianos, COP lo equivalente a (20.000 USD) para comparar maquinaria y materia prima, con esto incrementaríamos la producción a 300 pares por mes.

REC: ¿A cuánto tiempo está proyectado el retorno de la inversión?

LC: Según nuestro plan de negocio, calculamos que a los seis meses se estaría recuperando ese capital para que el inversionista que crea en nosotros recupere lo invertido.

De igual manera queremos que el inversionista también se vincule para apoyar el proceso de distribución y lograr crecer en el mercado.

REC: ¿Cómo están realizando la venta?  ¿A través de qué canales de distribución?

LC: Como no teníamos registro de marca y patente estábamos haciendo con personas cercanas y puerta a puerta, no podíamos estar en tiendas; en este momento estamos tramitando lo referente para la obtención del registro y esperamos obtenerlo en poco tiempo.

Hay una cadena de almacenes de calzado a nivel nacional que están interesados en vender los zapatos en sus tiendas.

REC: ¿Cómo va ese proceso de registro de patente y marca?

LC: Logramos que  Artesanías de Colombia hiciera un estudio a puerta cerrada de nuestro producto y obtuvimos la certificación como producto artesano, con ese certificado, nos dieron un descuento del 95% para el registro por patente y registro de marca, lo cual nos ayudó muchísimo, ya se radicó, está en proceso. Esperamos que no tarde mucho.

REC: ¿Cómo es la contraprestación a las personas que trabajan en Tejiendo un país?

LC: Actualmente, las señoras que nos colaboran se ganan la mitad de zapato que elaboran, el objetivo es lograr constituirnos formalmente para brindar un sueldo con prestaciones de ley, que tengan un trabajo digno de óptimas condiciones. Para eso es necesario tener un inversionista, el tema del registro de marca y patente, poco a poco lo vamos logrando.

REC: Ustedes fueron seleccionados entre las mejores 60 iniciativas de emprendimiento social del país en la Convocatoria RECON. ¿Cómo les ha servido esto?  

LC: Para darnos a conocer, gracias a esa participación logramos que Artesanías de Colombia no diera la oportunidad de revisar el producto y certificarlo, lo que posteriormente ayudo para obtener el descuento en el proceso de registro de marca y patente. De igual manera, a raíz de RECON en la Universidad logramos que nos dieran un curso de emprendimiento para apoyarnos con conocimiento.

Próximamente participaremos en una feria de emprendimiento de la universidad con un stand para exponer el producto, ahí competimos por un cupo para ir a Canadá en representación de la Uniagustiniana, tenemos fe que ese premio será para Tejiendo un país.

REC: ¿Un consejo para los emprendedores sociales?

LC: Que si uno quiere es posible, hay que demostrar al mundo la capacidades que tenemos así en ocasiones nos digan que no podemos hacerlo.

A continuación compartimos el vídeo con el que participaron en la convocatoria RECON y que cuenta más sobre su iniciativa y producto